Por Juan Tomás Valenzuela
En vez de estar maquinado
sobre si hay o no elecciones,
enfilemos los cañones
en lo que aquí está pasando.
El Covid se está llevando
la vida y la economía,
mientras Consuelo y la arpía
que cobra en Energía y Minas
andan como dos letrinas,
expulsando porquerías.
Mientras el pueblo conciente
lucha contra esta pandemia,
la bocinería se apremia
de manera diligente,
a pintarle al presidente
un panorama expedito,
pá que se agencie un huequito
en este infausto proceso,
y siga ruyendo el hueso
mientras el pueblo anda al grito.
Los que hoy promueven el caos
con la “distancia social”,
son el Penco, Euri Cabral,
Martínez Pozo y João.
Y dos o tres desgraciaos
del “Mojón de la Mañana”,
el presidente, su hermana,
la senadora Cristina,
el hijo e’ César Medina
que se la busca en el 9,
Álvaro, Nayib Chabebe
y el “avión” de Energía y Minas.
A todo estos delincuentes
que están puestos pá lo malo,
les dá lo mismo Gonzalo
que este ungido pestilente.
Y aunque ya los expedientes
están siendo elaborados,
ellos creen que el pejepalo
podría salvarles el día,
junto a la otra ruyía
y el engullidor de escúalos.
Hay un tál Eduardo Prats
que por salami con fritos,
le apelaría el “Sambenito”
a Judas y a Barrabás.
Ni Temístocles Montás,
ni la vice de Gonzalo,
son más corruptos, más malos,
más mañosos y proclives,
que este malandro que vive
de azuzar al pejepalo.
Juan de los Palotes
23 abril 2020
